


Los padres de la nena baleada en la Isla Maciel, quién fue dada de alta este mediodía, dieron entrevistas en TV y se pudo ver que tenían un cuadro con una foto de Cristina Kirchner en la pared de su casa. Supongo que quisieron mostrarlo como una respuesta a Chiche Duhalde, cuando dijo que en las viviendas de los sectores populares se podrían encontrar cuadros de Perón, Menem o Duhalde, pero nunca de Néstor o Cristina.
Me pregunto si esta gente no ve ninguna relación entre lo que le pasó a su hija, lo que tienen que vivir todos los días los habitantes de esa zona por la inseguridad, y la total ignorancia voluntaria que el gobierno manifiesta en temas de seguridad. (Lo se, en cualquier otro tema la situación es igual, pero estamos hablando de seguridad)
El círculo vicioso del populismo ha convertido este tipo de temas en hechos de la naturaleza, que en la mentalidad oficial no son responsabilidad de ninguno de los victimarios ni de sus cómplices en los poderes públicos. Mientras el Estado les entregue la dádiva cuando sea necesario, no importa nada, ni siquiera vivir despojado de los derechos individuales más fundamentales.
Pero bueno, después de todo, ellos lo eligen. Ellos y otros millones de argentinos vienen eligiendo el mismo cuento de hadas desde hace sesenta años, donde cada vez más los únicos privilegiados son los niños que no son baleados en un enfrentamiento entre bandas.
ACTUALIZACIÓN: Se confirma lo que dije antes sobre la dádiva. El padre de la nena acaba de admitir que el intendente les regaló una casa. Encima todavía dice que "ama la Isla Maciel". Magnífico.