miércoles, 16 de septiembre de 2009

Five minutes to Caracas

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Mientras escribo esto, el oficialismo consiguió aprobar la nueva Ley de Radiodifusión, ayudado por sus camaradas del Partido Socialista y los del sector de Pino Solanas. Éste último se quejó de que la ley no es lo suficientemente chavista para sus estándares.

"Ganamos en el Calafate, porque ahí los medios son del querido amigo Rudy, no de los destituyentes de Clarín"

Cristina Kirchner, en sus tan usuales conferencias de prensa y variando un poco con la estrategia de interrumpir hasta a los pastores brasileños con la cadena nacional, elige ceder en el aspecto menos catastrófico del proyecto de ley para mantener el control de los medios de comunicación que todo el resto del proyecto posee. La estrategia fue cambiar algo mínimo, para que todo siga como hasta ahora.

Y lo peor es que la estrategia funcionó, no gracias a sus capacidades políticas, sino al atraso y a la adolescencia ideológica de algunos opositores.

Los diputados pertenecientes a la izquierda presentaron como el mayor problema de la ley presentada por el kirchnerismo la entrada de las telefónicas al mercado de cable. Algo similar a plantear que el principal problema con Hitler era su vegetarianismo.

Ladies and gentleman, el sector moderado de los montochorros. Con la presencia del doble de riesgo de Luis Ventura, y el hermano de Marcelo Polino, Héctor, los socialistas presentan una obra marplatense con Jorge Corona.

Estos iluminados de la izquierda argentina armaron un verdadero escándalo con el tema de las telefónicas, logrando instalar ese tema como lo más destacado de una ley que incluye cientos de regulaciones que cercenan la libertad de expresión. Tener que escuchar al socialista Rubén Giustiniani decir que la nueva ley "es una mezcla de dictadura y neoliberalismo" fue demasiado para mi estómago. Parece que la izquierda usa el termino "neoliberalismo" para definir aquellos experimentos en los que les interesaría participar, pero sin empresas en el medio, eso sí sería un horror. Y eso no es lo peor: el Partido Socialista utilizó esa conferencia para anunciar su oposición al proyecto, sólo para votar a favor casi una semana después.
¿Que van a decir aquellos que repetían que Binner era como un político europeo, toda una muestra de moderación?

Los progres insistieron tanto con el tema de las telefónicas que consiguieron su deseo: el artículo será eliminado. Pero gracias a eso, también consiguieron que otra muestra de gatopardismo coyuntural del gobierno quedara ante la opinión pública como un gesto real consenso, algo que está lejos de aparecer en los planes de cualquiera de los que se sienta en la mesa chica de Olivos. Hacen como que retroceden, para ganar algunos votos y aprobarla cuanto antes.

Y uno no puede culparlos sólo a ellos por eso. Conceden por izquierda porque el reclamo vino de ese lado y los ayudó a conseguir votos. Como saben que los que objetaron exclusivamente el tema de las telefónicas se encuentran en un mismo nivel de irracionalidad ideológica que ellos, no tuvieron ningún problema en hacer esa "concesión" y disfrazarla de gesto democrático.

Y eso nos lleva a la gran mentira del oficialismo, repetida desde el principio: esta ley fue consensuada y discutida con todos los sectores. Sí, uno pudo ver los fuertes debates y cuestionamientos de la CTA, la agrupación Andresito o la Federación Juvenil Comunista, todas organizaciones caracterizadas por el pluralismo y el respeto a las libertades individuales.
Es como si hiciera un foro con Charles Manson, Jack el Destripador y Willie Horton para decidir si es moralmente correcto cometer un asesinato.

La misma mentira fue adaptada al recinto de Diputados. Agustín Rossi diciendo que hicieron concesiones en la ley, propuestas por "Encuentro Popular y Social" y "FORJA". O sea, tomaron propuestas de diputados electos en listas de su partido, y los disfrazaron de oposición cuando lo creyeron conveniente.
Bajo la nueva ley, muchos de esos micrófonos van a desaparecer. El mamarracho de la foto, contento. Ganó la "democratización"

Creo que no haría falta que lo diga, pero en este país de imbéciles es necesario: si hago una ley convocando sólo a gente que quiere controlar los medios, el resultado sólo puede ser una ley que controla a los medios. Cuando toda la televisión sea idéntica a Canal 7 y aparezcan los resultados de esta aberración, espero que los estúpidos que apoyaron esto, y los que no prestaron atención, aprendan de una vez por todas.

7 comentarios:

Fernando Rocchia dijo...

excelente blog...felicitaciones!!

Francisco D'Anconia dijo...

Muchas gracias! Tus dibujos son muy buenos.

Juampi dijo...

Encontré tu dirección en un comentario en el blog Periodismo Y Opinión. Leí esta y otras notas, me parecieron muy buenas, me gusta el estilo.

Saludos!.

depre forever dijo...

Binner un político serio, ajajaja, la zurda autóctona, el verso y el mercedes benz en la puerta.

Ceo dijo...

Este país siempre con tutores que nos imponen la forma en que debemos vivir. Ya estamos grandes para aguantar a estos imbéciles que viven presos de ideologías, que siempre quedan caducas por la velocidad de la realidad, no necesitamos más corsés ideológicos, lo único que necesitamos es más libertad para que el país crezca.
Abrazo.

Eduardo Castillo Páez dijo...

Muy buen post.
Coincido totalmente con lo expresado por Ceo y me sumo a los muchos que se oponen a un proyecto que implica un retroceso en el respeto a las libertades de prensa y expresión.
La incoherencia de algunos es ya una característica.

Saludos cordiales.

Francisco D'Anconia dijo...

Depre, yo tenía una profesora en el secundario que hablaba todo el tiempo de los males del capitalismo y llegaba a la escuela en su camioneta Grand Cherokee.

Ceo y Eduardo, es verdad. Esta ley parece escrita por un centro de estudiantes. Todo el proyecto muestra un profundo desprecio por el lucro, la empresa privada y la libertad de elección del individuo. Saludos.