viernes, 27 de noviembre de 2009

La televisión oficial

Compartir Que los medios de comunicación están siempre coqueteando con los espacios de poder político no es ninguna novedad. Tampoco es noticia que Canal 13 haya hecho por estos días bastante evidente su antikirchnerismo, la guerra entre el gobierno y el Grupo Clarín iniciada por declaraciones poco felices de máximos representantes del kirchnerismo y ratificada por el mismo ex presidente, establecieron una nueva coyuntura política, en donde la neutralidad periodística es moneda fuera de circulación a la fuerza. La ley de medios ingresó en la escena como ese bozal histórico de los que repudian la libertad de expresión, la única conclusión es que el compromiso con la democracia es meramente revanchista. Las opciones por parte de gobierno eran varias, la censura era la ruta más efectiva en el corto plazo.

Si hay algo que no puede faltar... Para que un oficialismo pise fuerte debe contar con medios de comunicación propios, de esta manera no sólo censura sino que distribuye gratuitamente propaganda oficial. Con fondos públicos, se paga a periodistas mediocres, de la altura de Sandra Russo o María Julia Olivan (cuyo reservorio de ideales es tan rico como el de un mosquito). Presentando notas que no puede refutar porque es poco probable que entienda lo que significa el fascismo o la derecha, de la que tanto se burlan cuando alguien tiene la mala idea de de nombrar la palabra “inseguridad”.

Son animalitos pagos que jamás tendrían la relevancia que tienen, si no fuera porque bajan línea de una manera fabulosa, desde un canal “de todos”... los que hoy ocupan el gobierno.
Entre el clan de 6, 7, 8 y TVR los sábados, tenemos dosis necesaria para archivar.

Todo esto es esperable de un canal sostenido por le gobierno, pero... ¿es normal en un canal privado? ¿Cuál es la necesidad real de chupar medias desde un canal de estas características? ¿Cuál es el beneficio?
No entiendo la postura que durante el último tiempo está tomando TELEFE. La entrevista a la que “accedió” Cristina, con Soledad Silveyra, una mujer a la que el gobierno había ofrecido tiempo atrás, una candidatura para las pasadas elecciones ya empezó a sonar raro.
No era suficiente! Después de las fuertes declaraciones de Susana Giménez acerca de la inseguridad, al canal “se le ocurre en beneficio de la diva” acotar su ciclo diario, a un sólo día a la semana. Ni hablar de la entrevista de casi una hora que puso al aire telefe con el ex-presidente antes del cierre de listas, con un acertado titular por aquellos días, del periodista de La Nación Diego Valenzuela: “Kirchner, artista exclusivo de TELEFE”.
El informe de La Liga, que decía mostrar la verdad sobre los productores de soja, además de ser irrisorio fue decadente, no hizo más que hacer evidente una postura tomada.
Cuando creí que no se podía mostrar más obsecuencia, veo otro canal estatal, esta vez “Encuentro”, y me desayuno con que una de las periodistas del ciclo al que hice referencia, Gisela Busaniche, se encontraba realizando un programa acerca de la veracidad de la información que ponen al aire los medios de comunicación y la intencionalidad con que lo hacen; allí aparecían también los periodistas de TELEFE, hablando con dejos de ingenuidad sobre la selección del material que es “conveniente” poner al aire de acuerdo a los intereses del noticiero, se escuchaban cosas como: “debemos usar música dramática para que los televidentes se conmuevan con lo que ven y no cambien de canal”, dentro del mismo informe estas aseveraciones se contraponían todo el tiempo, con un noticiero que sólo se emite por internet, en donde sus creadores se jactaban de poner al aire “la verdad” sin deformaciones, la verdad a la que hacían referencia era la lucha de los trabajadores de KRAFT.
Todo esto demuestra la imperiosa necesidad de concretar aquella venta postergada cuando se desató el conflicto del campo, en donde el chofer de los K, Rudy Ulloa, tuvo la curiosa idea de comprar TELEFE. Era en ese momento si mal no recuerdo, cuando Crisitina nos contaba acerca de los “dimes y diretes” del PULPO MULTIMEDIÁTICO.
Sin más que decir, lo último que quiero agregar es mi postura en defensa de una Argentina con mucha comida para pulpo.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Las maravillas de la educación progresista

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Ahora entiendo por qué el kirchnerismo está tan obsesionado, casi exclusivamente, con el control de los medios de comunicación. Es que el otro gran medio transmisor de cultura, la educación, se convirtió hace bastante tiempo en otro bastión del progresismo político. Les viene como anillo al dedo.

Voy a comentar solo dos casos, pero pueden servir de ejemplo para las miles de escuelas de todo el país, ya que en una gran mayoría las cátedras de Ciencias Sociales y de Construcción de la Ciudadanía sirven para adoctrinar, no los valores que el título de la segunda asignatura proclama sino en una ideología de izquierda primitiva, tercermundista y simplificada en torno a grandes conspiraciones de “los malos” llámense Estados Unidos, las multinacionales o el FMI.

Primer caso: La materia es Geografía, de segundo año del polimodal. El profesor, en lugar de utilizar manuales escolares, que los hay de buena calidad (Santillana es un ejemplo) utiliza artículos periodísticos. De Clarín o La Nación, imaginará el lector. Para nada: el profesor elige estudiar problemáticas a partir de artículos de un panfleto llamado El Socialista, que llama a “no pagar la deuda externa” o estatizar todas las empresas de servicios públicos.

Ahora me entero que este panfleto pertenece a la agrupación Izquierda Socialista, dato que sirvió para aumentar mi indignación. Les dejo otro ejemplar para que se diviertan.

El mismo profesor también opta por presentar a los alumnos temas como el peligro de la “privatización del mar” en Chile, o de una historieta que compara la conquista de América con la intervención estadounidense en Irak.

Segundo caso: Primer año de polimodal, en una escuela privada. La materia es Construcción Ciudadana. Revisando los contenidos vistos en el año, me encuentro con que lo que debía ser la formación de futuros ciudadanos se reduce a un montón de críticas al “neoliberalismo”

Toda la materia se veía comprimida a una crítica ideológica de bajísima calidad, llevada al ridículo en muchos casos, como las guías de estudio sobre el reportaje de Página/12 a un “criminólogo” cuya gran teoría es que el causante de la delincuencia es… por supuesto, el neoliberalismo.

Lo peor es que en ningún momento encontré en los contenidos una explicación, o un fundamento teórico para justificar que un área tan importante sea convertida en un instrumento de manipulación muy peligroso.

Quizás a esta altura suene obvio, pero uno de los factores claves en la decadencia argentina es que dejamos de formar ciudadanos, para crear potenciales votantes de Pino Solanas. Cómo vamos a lograr un país con los consensos mínimos de los países desarrollados, mientras una mayoría salga de la escuela con estos preconceptos, es algo que me inquieta bastante.

sábado, 7 de noviembre de 2009

Cumbia villera Vs. Libre expresión

Compartir Explorando la decadencia que sufre el país en todos los niveles, sin caer en un irrecuperable fatalismo y dejando atrás un ambicioso análisis que totalice la realidad, intenté llegar a algún punto que conjugue los diferentes aspectos que le están brindando una base sólida a este espíritu de empobrecimiento moral, progresivo que necesitamos erradicar. La música, un género específico de música, ha ingresado en la escena social como ese factor que institucionaliza la decadencia, la miseria y promueve la tergiversación de los valores. La “cumbia villera” tiene sus orígenes en los inicios del siglo XXI, y es en Argentina donde sus letras se han hecho carne; en los estratos sociales más bajos primero, y escalando hacia otras dimensiones después.
Esta música se aleja totalmente de cualquier expresión cultural de protesta social contra un sistema político y económico de turno, nada tiene que ver con el género del Hip-Hop, Rap o incluso el Rock and roll. Sus letras reflejan un odio explícito al sistema de valores tradicionalmente aceptados, resienten cualquier deseo de progreso, y es claro que ninguna de ellas propone una alternativa. Sus autores promueven la adopción de valores negativos como la pobreza, la miseria, la drogadicción y la falta de dignidad; pensamientos básicos envasados y listos para consumir en un mercado bailantero demandante.
Ante todo, la cumbia villera está legalizando la delincuencia. Este género no expresa un modo de vivir la vida, sino un modo de permanente confrontación con la muerte. Sus letras alteran cualquier buena expectativa, congenian los papeles de víctima y victimario de una manera tan sutil, que cualquier joven tienen acceso a información necesaria para convertirse en un resentido social o en el peor de los casos, en un asesino. Enunciados para vivir la vida fácil, con acceso directo a todos los fines, apartando del juicio crítico todos los medios.
Buscando las letras más difundidas de grupos de cumbia villera, llegué a fragmentos que mutilan el sentido de un proyecto de vida:

- “si sos anti chorro vas a perder / con una nueve en mano / hasta los dientes vamos armados / vamos re locos bien jugados / robando bancos y mercados” (Pibes chorros)
- “No puedo caminar de tanto jalar / estoy re cantina yo quiero vitamina / me compro una bolsa y estoy pila, pila” (Damas Gratis)
- “yo quería ahogarme en una pileta de vino / y morirme re mamado ahogado en mi pileta de vino / que levanten las mano’ el que quiere morirse / mamado, ahogado en mi pileta de vino” (Damas gratis)
-“colarte un dedo no querés / cuidado, cuidado / que tu agujero es muy delicado”

No es necesaria una búsqueda exhaustiva para toparse con semejantes muestras. Los jóvenes de hoy, asumieron como positivos los valores que excreta el género y los informes televisivos que tienen como principales protagonistas a presidiarios no hicieron más que legitimar ese velo de mártires que viste a sujetos que aceptan como verdaderas y válidas, máximas de vida paupérrimas y autodestructivas. La población trabajadora, fue reemplazada por jóvenes que deambulan sin rumbo fijo por la vida, analfabetos, sin identidad legal, disminuidos mentalmente por el consumo de drogas y con un poder de intervención social y política sumamente acotado, pero con un instrumento muchísimo más peligroso: una nueve milímetros al que cualquiera puede acceder y un cigarrillo de pasta base que presta el impulso.
Considero que es aquí donde debería actuarse, tenemos frente a nosotros un arma de gran alcance que destruye como una pandemia el futuro de este país. Paralizados en un presente incierto, sembramos la semilla indicada para un futuro de las mismas características. La apología del delito y de la vida parasitaria es aceptada desde la difusión de este género. Pensando en este sentido, recuerdo el engorroso proceso judicial que tuvo como protagonista a Andrés Calamaro, por haber incitado al consumo de drogas, con su frase: “Que linda noche para fumarse un porrito” en una de sus presentaciones en la ciudad platense. Damas gratis, Pibes chorros, y todas las bandas que tienen como estandarte la promoción de estos raros valores, violan explícita y sistemáticamente el artículo 213 del Código penal argentino, pero aquí la justicia es ciega, sorda y muda. El límite es muy estrecho, y todavía no entiendo la vara con que se juzga: ¿librepensadores o criminales?

viernes, 30 de octubre de 2009

Orientalismo

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Por el desarrollo de las últimas elecciones en el país vecino, uno podría tratar de describir al Uruguay de la misma manera que los autores románticos del siglo XIX se referían al Cercano Oriente: un lugar exótico, lleno de aventuras y misterios inaccesibles.

Porque seamos honestos, para la Argentina no habría nada más exótico que una república ordenada, aburrida, sin sobresaltos y con instituciones que funcionen al estilo uruguayo. Estamos tan acostumbrados al caos y al delirio actual que nos parece digno de la ciencia ficción que un lugar tan cercano haya podido alcanzar semejante nivel.

Pepe Mujica no me cae particularmente bien y preferiría que su oponente ganara el ballotage, pero parece ser comparativamente mejor a los Kirchner en varios aspectos. Ha repetido en varias ocasiones que quiere llevar a su país al primer mundo, se arrepintió de su pasado violento y dice no tener nada que ver con las políticas estatizadoras. Estará por verse si es así, pero el hecho de que el principal candidato a presidente tenga un discurso moderado es realmente envidiable. (Y estamos hablando del candidato de la izquierda)

Otro motivo de envidia es el rechazo a la iniciativa que proponía reabrir las causas contra los militares del proceso militar uruguayo. Demostrando siempre mayor sensatez, los orientales deciden no reescribir la historia y concentrarse en gobernar hacia adelante, sin generar conflictos sociales ni batallas ideológicas que caducaron hace treinta años.

Tratar de comparar eso con la Argentina parece destinado a fanáticos del masoquismo, viendo como nuestro gobierno insiste en revivir la "patria socialista" y repetir hasta el hartazgo consignas olvidadas en el resto del mundo.

Buenos Aires y Montevideo estarán a pocos kilómetros geográficamente, pero en materia de valores e instituciones, una distancia abismal separa a la dos ciudades. De alguna manera siempre nos ingeniamos para imitar lo peor y no los buenos ejemplos que abundan no demasiado lejos.

domingo, 25 de octubre de 2009

Piquetes de la escasez

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Como en el esquema mental de cualquier progresista la pobreza es algo digno de santificación, no pueden dejar de justificar todo piquete que se haga, supuestamente, en nombre de ella. Pedir libertad para producir y trabajar es de facho, lo moralmente válido es pedir subsidios a un gobierno.

Y eso que estamos hablando de organizaciones con un gran sentido poético, como “Barrios de Pie” o “Jóvenes de Pie”. Menos mal que para ellos, mantenerse a base de subsidios estatales no implica estar arrodillado, de otro modo no podrían vivir con su conciencia.

En estas últimas semanas se destapó el caso de la organización Túpac Amaru de Jujuy, un movimiento que tiene como líder a Milagro Sala, la puntera predilecta de Alicia Kirchner. Como tal, controla en esa provincia un poder proporcional al nivel de clientelismo político, y maneja más poder que legisladores provinciales, senadores o diputados. El control de la política argentina pasa hoy por el manejo de estas hordas organizadas y subsidiadas desde lo más alto del Estado nacional.

Tanto repitieron los progres durante los setenta que la violencia de arriba generaba la violencia de abajo, que ellos terminaron convirtiéndose en los protagonistas de ese proceso en pleno Siglo XXI, financiando y legitimando la violencia de estas organizaciones, ya sea “desde arriba” o en el llano.

Estas organizaciones nunca hubieran llegado a ser lo que son si no se las hubiera gestado y financiado desde el poder político como se hizo bajo el kirchnerismo, pero tampoco hubieran adquirido esa importancia si en la escala de valores de muchos, ser un “dirigente social” que ejerce esa función gracias a las prebendas oficiales es algo más valedero que invertir, generar riqueza y dar trabajo.

Detrás del odio al lucro (ajeno, por supuesto) del matrimonio gobernante, se esconde esta concepción de profundo desprecio hacia el derecho de propiedad, y la defensa de personas que utilizan métodos mafiosos y fascistas para obtener sus objetivos, debido a que significan muchos votos cautivos y el control territorial de las zonas más pobres de la Argentina.

Yo diría que el principal problema de Jujuy –y del país, también- es la abundancia de personas como Milagro Sala y la escasez de verdaderos emprendedores y ciudadanos.

jueves, 8 de octubre de 2009

Se imaginan?

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En 1992, la tristemente célebre María Romilda Servini de Cubría buscó impedir que se mencionara su nombre en el programa de Tato Bores. En repudio, una multitud de artistas y periodistas se reunió para apoyar al humorista frente a una clara situación de censura.

En 2009, el gobierno kirchnerista impone un proyecto de ley de radiodifusión con el claro objetivo de controlar los medios colocándolos bajo la órbita directa del Estado, y muchos de los famosos que aparecieron en este video, hoy apoyan la medida. Aparece gente muy respetable que ha mantenido su posición crítica, pero son la excepción. La mayoría eligió convertirse en apologistas del régimen.

¿Se imaginan ustedes a muchos de los que pusieron la cara por Tato Bores, por mencionar algunos, a Victor Heredia, Patricia Sosa, Alejandro Dolina, Horacio Fontova, Juan Leyrado, Soledad Silveyra, haciendo lo mismo contra la ley de medios K? ¿O a Victor Hugo Morales, que también defiende contra viento y marea la nueva ley?

¿Quién cantará por nosotros ahora? ¿Cuántos de ellos gritarán cuando Néstor Kirchner se dedique a ejercer la censura previa contra algún periodista? ¿Cuántos de ellos se quejarán cuando la policía mediática del gobierno imponga contenidos?

¿Quién de ellos se escandaliza ahora, un momento en el que la libertad de cualquiera está en juego?

Quizás la mezcla entre afinidad ideológica y subsidios puede más que cualquier valor.

Será que el pluralismo es otro invento neoliberal, tan circunstancial que puede ser reemplazado por la tutela del Estado sin que ellos noten la diferencia.

domingo, 27 de septiembre de 2009

Historias de Nueva York

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De Mario Ishii y el Chino Navarro a Barack Obama y Columbia. Política exterior kirchnerista sin escalas.

En este momento del año se produce otro de los tradicionales viajes de la Divulgadora Presidencial a Nueva York, acompañada de una comitiva distinguida en el campo de la política exterior, como José María Díaz Bancalari, que tiene dificultades para expresarse en el idioma español, ya ni digamos en inglés.

Fue invitada, nuevamente, a hablar en la Universidad de Columbia. Para los que se estén preguntando qué habrán visto los directivos de semejante institución en una jefa de estado tan decadente, recuerden que el presidente de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, negó el holocausto en ese mismo lugar. Columbia parece tener una política no demasiado exigente para elegir a sus oradores: si invitaran a un borracho tirado en una esquina de Manhattan hubieran garantizado un discurso más coherente.

Distinguished Fellow Cristina Kirchner. Doctorada en modelos de acumulación con matriz diversificada y análisis de cifras electorales del Calafate.

Y una vez más, como ya demostró con sus Grandes Éxitos Discursivos como el efecto jazz y "la soja es un yuyo", nos dejó otra joyita que demuestra la peligrosidad de sus ideas y de su modus operandi, especialmente en este contexto donde la aprobación de la ley de medios es presentada por ellos como la conquista del siglo.
"Creo que nos debemos dar el gran debate acerca de la información, acerca de la posibilidad de que los ciudadanos sean informados sin estar contaminada la información, no por la prédica del Gobierno, que obviamente no es dueño de los medios de comunicación, porque, en definitiva, todos los medios son de carácter privado salvo un canal o radio estatal, sino contaminados por los grandes intereses económicos que operan también a través de los medios de comunicación ocultando cosas y muchas veces impulsando a que las sociedades también apoyen o tomen decisiones en base a informaciones falsas"
La locura kirchnerista con respecto a los medios da para tanto que ella, dentro de sus profundas limitaciones, no pierde oportunidad para teorizar al respecto. Al parecer el estatismo se ha expandido hacia todos los ámbitos de la vida, de tal manera que ella puede decir que es un derecho ciudadano que el Estado "limpie" la información que los medios transmiten contaminada por intereses económicos. Esto significa, traducido de kirchnerismo a castellano, que el Estado es un ente neutral y puro que comunica la verdad a la gente, y los privados son monstruos que sólo comunican lo que les conviene.

Es lógico que piensen así, están tan acostumbrados al microcosmos feudal santacruceño que la idea de que los medios funcionen como un contrapeso del poder político les parece sacada de otro planeta. La existencia de voces que contrarresten el discurso oficial es todo un intento de desestabilizar.

Veamos hasta dónde es capaz de llevar esta teoría sobre la naturaleza demoníaca de los medios de comunicación:
“Zelaya fue destituido por un golpe cívico-mediático, porque las nuevas fuerzas, que muchas veces impulsan movimientos destituyentes en las democracias latinoamericanas, que han logrado dar a sus ciudadanos derechos, crecimiento económico, que tal vez perjudican en algo la riqueza o el dominios de sus elites, cuentan tal vez con nuevos tipo de concentraciones que no son de carácter militar, sino que manipulan u ocultan también la información”
Ni la izquierda marxista ha tenido el atrevimiento de afirmar que lo de Honduras fue un "golpe cívico-mediático". Ellos prefirieron culpar a los Estados Unidos, un clásico, a pesar de que Obama hace todo lo posible para situarse del lado de Zelaya. Cristina Kirchner fue más allá de las típicas teorías conspiranoicas, y le adjudicó a los medios de comunicación el derrocamiento del mandatario chavista.

Es algo absurdo y peligroso que el manejo de la información esté en manos de cualquier gobierno, pero que un gobierno que utiliza los medios públicos para difundir los proyectos del gobierno y denostar a la oposición pretenda ocupar ese rol, me resulta profundamente rídículo, más que Mariotto diciendo que Canal 7 es un medio “público, no gubernamental”

En fin. Les dejo la mejor columna de La Nación que he leído en mucho tiempo:

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Five minutes to Caracas

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Mientras escribo esto, el oficialismo consiguió aprobar la nueva Ley de Radiodifusión, ayudado por sus camaradas del Partido Socialista y los del sector de Pino Solanas. Éste último se quejó de que la ley no es lo suficientemente chavista para sus estándares.

"Ganamos en el Calafate, porque ahí los medios son del querido amigo Rudy, no de los destituyentes de Clarín"

Cristina Kirchner, en sus tan usuales conferencias de prensa y variando un poco con la estrategia de interrumpir hasta a los pastores brasileños con la cadena nacional, elige ceder en el aspecto menos catastrófico del proyecto de ley para mantener el control de los medios de comunicación que todo el resto del proyecto posee. La estrategia fue cambiar algo mínimo, para que todo siga como hasta ahora.

Y lo peor es que la estrategia funcionó, no gracias a sus capacidades políticas, sino al atraso y a la adolescencia ideológica de algunos opositores.

Los diputados pertenecientes a la izquierda presentaron como el mayor problema de la ley presentada por el kirchnerismo la entrada de las telefónicas al mercado de cable. Algo similar a plantear que el principal problema con Hitler era su vegetarianismo.

Ladies and gentleman, el sector moderado de los montochorros. Con la presencia del doble de riesgo de Luis Ventura, y el hermano de Marcelo Polino, Héctor, los socialistas presentan una obra marplatense con Jorge Corona.

Estos iluminados de la izquierda argentina armaron un verdadero escándalo con el tema de las telefónicas, logrando instalar ese tema como lo más destacado de una ley que incluye cientos de regulaciones que cercenan la libertad de expresión. Tener que escuchar al socialista Rubén Giustiniani decir que la nueva ley "es una mezcla de dictadura y neoliberalismo" fue demasiado para mi estómago. Parece que la izquierda usa el termino "neoliberalismo" para definir aquellos experimentos en los que les interesaría participar, pero sin empresas en el medio, eso sí sería un horror. Y eso no es lo peor: el Partido Socialista utilizó esa conferencia para anunciar su oposición al proyecto, sólo para votar a favor casi una semana después.
¿Que van a decir aquellos que repetían que Binner era como un político europeo, toda una muestra de moderación?

Los progres insistieron tanto con el tema de las telefónicas que consiguieron su deseo: el artículo será eliminado. Pero gracias a eso, también consiguieron que otra muestra de gatopardismo coyuntural del gobierno quedara ante la opinión pública como un gesto real consenso, algo que está lejos de aparecer en los planes de cualquiera de los que se sienta en la mesa chica de Olivos. Hacen como que retroceden, para ganar algunos votos y aprobarla cuanto antes.

Y uno no puede culparlos sólo a ellos por eso. Conceden por izquierda porque el reclamo vino de ese lado y los ayudó a conseguir votos. Como saben que los que objetaron exclusivamente el tema de las telefónicas se encuentran en un mismo nivel de irracionalidad ideológica que ellos, no tuvieron ningún problema en hacer esa "concesión" y disfrazarla de gesto democrático.

Y eso nos lleva a la gran mentira del oficialismo, repetida desde el principio: esta ley fue consensuada y discutida con todos los sectores. Sí, uno pudo ver los fuertes debates y cuestionamientos de la CTA, la agrupación Andresito o la Federación Juvenil Comunista, todas organizaciones caracterizadas por el pluralismo y el respeto a las libertades individuales.
Es como si hiciera un foro con Charles Manson, Jack el Destripador y Willie Horton para decidir si es moralmente correcto cometer un asesinato.

La misma mentira fue adaptada al recinto de Diputados. Agustín Rossi diciendo que hicieron concesiones en la ley, propuestas por "Encuentro Popular y Social" y "FORJA". O sea, tomaron propuestas de diputados electos en listas de su partido, y los disfrazaron de oposición cuando lo creyeron conveniente.
Bajo la nueva ley, muchos de esos micrófonos van a desaparecer. El mamarracho de la foto, contento. Ganó la "democratización"

Creo que no haría falta que lo diga, pero en este país de imbéciles es necesario: si hago una ley convocando sólo a gente que quiere controlar los medios, el resultado sólo puede ser una ley que controla a los medios. Cuando toda la televisión sea idéntica a Canal 7 y aparezcan los resultados de esta aberración, espero que los estúpidos que apoyaron esto, y los que no prestaron atención, aprendan de una vez por todas.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Ley de medios, parte II

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¿Por qué no hay diputados con un discurso como el de Daniel Vila? ¿Y qué hace Carlos Raimundi ocupando ese lugar?

No hace falta un gran análisis político para deducir que el proyecto del gobierno sólo propone regulaciones que coartan la libertad de expresión y dejan toda una red de concentración de poder y discrecionalidad en manos del Estado. Me pregunto por qué dirigentes políticos que dicen pertenecer a la oposición y son veteranos en cuestiones legislativas parecen desconocer esto.

Es indignante y desesperante que el único discurso certero y coherente escuchado sobre el tema tenga que venir de un empresario de medios como Daniel Vila, y sólo después de varios años de observar pasivamente las extorsiones del régimen kirchnerista. ¿Por qué a los referentes de la oposición les cuesta tanto rechazar el proyecto por sus intenciones de censura, y se detienen en nimiedades?
Aquí van algunos fragmentos de Daniel Vila:
¿Quién mejor que el matrimonio presidencial puede conocer la diferencia entre libertad de expresión y de extorsión?

Usted no puede hablar de libertad de expresión, ni de la importancia que tiene para todos los sectores acceder a la posibilidad de expresarse, ni de institucionalidad, ni de credibilidad y mucho menos de libertad de prensa, cuando lo que está haciendo es profundizar con su proyecto de ley de radiodifusión el modelo venezolano de la llamada Ley de Responsabilidad Social de Radio y Televisión sancionada por el teniente coronel presidente Hugo Chávez Frías el 7 de diciembre de 2004. Sabemos su resultado. Medios amordazados y sirvientes del gobierno.

¿Con qué autoridad moral pueden venir a decirnos que los medios de comunicación mienten, si este gobierno va a pasar a la historia por haber falseado nada menos que el índice de precios?

Mientras tanto, en la nube de pedos de Diputados, la disidencias nunca van hacia lo central del proyecto. Su preocupación principal es que las telefónicas accedan al mercado del cable o que en el organismo de control no haya miembros universitarios o de la sociedad civil. ¿Cuotas de producción nacional? ¡Magnífico! dicen ellos, todo un instrumento contra el imperialismo cultural.

Si tienen algo para criticar de la ley, es que no los incluye a ellos en el control de los medios. Algo muy similar a lo que pasaba con Aerolíneas y AFJP, la consigna es "Si van a saquear, dejen que nosotros observemos mientras lo hacen"

El debate en Diputados de la semana pasada sobre si controlamos los medios a la venezolana o seguimos teniendo libertad de expresión, deja como resultado la decadencia generalizada. De los diputados oficialistas uno nunca espera algo coherente. El problema es que la oposición caiga en la misma lógica antimercado que les dice que libertad de prensa y libertad de empresa son incompatibles. Les preocupa más ese monstruo conocido como "poder económico" (ya saben, eso que creamos nosotros con nuestras decisiones diarias como consumidores) que la arbitrariedad que puede tener un Estado manejando la información. Gente que lee más a Naomi Klein que a George Orwell. Así nos va.
Les sugiero que revisen las experiencias políticas en las que se acabó la libertad de mercado, y nos cuenten si después de eso todavía prevaleció la libertad de expresión.

El espectro político del país está tan corrido a la izquierda que nuestros representantes tienen que oponerse a proyectos contra la propiedad y la libertad desde la más absoluta corrección política, nunca dudando de las "buenas intenciones" de reformar una ley que afecta un tema crucial para la república como este, o habilitar una discusión filosófica sobre la necesidad de saquear al campo.

Si hay algo que aterroriza a los políticos argentinos, más que ser descubiertos en un escándalo de corrupción, es que se los asocie con la defensa de los contratos privados. Eso sí que no lo podrían tolerar.

sábado, 5 de septiembre de 2009

10 ítems para egresar de la Academia "K"

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Se deberán desarrollar los siguientes aspectos:

1- Capacidad para mostrarse cómico ante cualquier situación, por más trágica que ella sea.

2- Habilidad para coordinar punteros políticos de características “matoneriles” en todos los municipios, haciendo hincapié en aquellas localidades en donde los habitantes venden su alma por un plan social de $150.

3- Marcada destreza en la designación de un gabinete corrupto.
Seminario optativo entre dos:
-“Pistolas a sueldo” que dicta el benemérito Guillermo Moreno.
-“La chica del millón de dólares” dictado por la licenciada Felisa Miceli.

4- Facultad para reunir a todo el periodismo en conferencia de prensa y luego, hallar el mecanismo para negarse a responder todas las preguntas.

5- Sagacidad innata para distinguir inequívocamente entre un reclamo “justo” y otro “de la abundancia”.

6- Talento inusitado para publicitar el totalitarismo en todas sus expresiones y disfrazarlo de “bien común”.

7- Habilidad para realizar alianzas con regiones cuyos líderes aspiren al cargo de “dictador”.

8- Capacidad demagógica para eternizarse en la política y resultar glorioso en todos los casos.
El egresado durante el tiempo de estudio, debió haber desarrollado hábilmente la amnesia temporal para horrorizarse de ciertas medidas, pese a haberlas promovido desde un selecto círculo “lameculista” en años anteriores.

9- Idoneidad para crear un enemigo íntimo, preferentemente perteneciente a alguno de los principales sectores económicos o de las comunicaciones.
El egresado en ningún caso deberá ser tolerante con las ideas contrarias al estatismo, tachará como “destituyente” y “golpista” a quien emita opinión diferente a la oficial y encomendará la tarea de convocar a un acto “por la democracia” a cualquier simio político que cuente con ganas de ganarse unas fichitas.

10- Aptitud para incrementar de manera multimillonaria las fortunas personales, pero sin olvidar la importancia de emocionarse hasta las lágrimas al hablar de la pobreza.

martes, 1 de septiembre de 2009

A los enemigos, ni libertad de prensa

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Uno de los principales sueños de la izquierda mundial, además de la abolición por decreto de la riqueza, es tener el control de los medios masivos de comunicación. Desde el realismo socialista promovido por Stalin hasta las indicaciones de Antonio Gramsci sobre la necesidad de una "literatura desalienante" todos han entendido como la vía fundamental para la creación de un hombre nuevo, el control de los aparatos ideológicos, que para ellos estarían encarnados especialmente por los medios.

Hay una famosa frase de P.J. O'Rourke que dice algo así como que el hecho de que los habanos esten racionados en Cuba es todo lo que necesitamos saber sobre el comunismo. Análogamente, creo que todo lo que necesitamos saber sobre la nueva Ley de Radiodifusión es que el tipo que la redactó dijo que Luis D'Elia es un gran intelectual.

La divulgadora presidencial Cristina Kirchner vive más obsesionada con los medios que los personajes grotescos que aparecen a diario en el programa de Jorge Rial. Más allá de eso, estoy seguro de que este país sería menos decadente si lo gobernaran estos últimos.

Entre las más importantes aberraciones que incluye la ley, se encuentran:

(1) Establecer cuotas de "producción nacional" de más del 70% en el caso de las radios, para las emisoras privadas. Caso similar con el cine nacional en la televisión abierta. Esa pedorrada subsidiada e ideologizada por la que nadie paga una entrada de diez pesos, pero que estos iluminados de alguna manera creen que la gente la consumirá si lo ponen por obligación.
La FM Rock&Pop deberá cambiar a los Guns N' Roses o Metallica por Los Nocheros o los grandes éxitos de Ignacio Copani.

(2) Considera a la radiodifusión como un "interés público" o sea, se asegura la posibilidad de intervenir para garantizar lo que el gobierno cree que es el interés del público. Para esto crea la figura del "Defensor del público de servicios de comunicación audiovisual" que actúa como un fiscal de los medios independientes, con la posibilidad de presionarlos por la vía judicial.

(3) Busca colocar en "igualdad de condiciones" a medios estatales, privados, y medios sin fines de lucro(?). Estos últimos serán financiados por "asignaciones del presupuesto nacional" Por lo tanto, serán también medios públicos. Se le asigna el 33% del espectro radioeléctrico a estas organizaciones. Para entender esto habría que imaginarse a Luis D'Elia dirigiendo un canal de televisión.

(4) La ley crea un sistema nacional de medios públicos, otorgándole a cada universidad, municipio y provincia radios estatales. Magnífico, ahora entidades que ni siquiera podían financiar sus gastos corrientes, estarán trabajando para mantener medios de comunicación. ¿Adivine quién pagará por eso?

Los militantes del control estatal de los medios ya tienen preparadas todas las respuestas para contestar a aquellos que nos oponemos: dirán que nos lavó el cerebro la corporación mediática, y que por ese motivo no sabemos lo que nos conviene. La misma excusa usarán el día que Carta Abierta se decida a gobernar el país a través de un consejo de notables.

Esto ya no es una pelea entre Kirchner y Clarín, dos viejos aliados. Este es el próximo paso hacia Venezuela. No podemos ver esto como un simple conflicto entre socios, se trata de una verdadera amenaza, quizás la más importante, a la libertad de expresión y a la empresa privada. La oposición debe hacer todo lo posible para que esta pesadilla orwelliana nunca llegue a tratarse.

miércoles, 26 de agosto de 2009

¿De qué te sirvió?

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En vistas de la situación económica en la que se encuentra la provincia de Buenos Aires, creo que deberíamos preguntarnos quién se benefició de las rodillas gastadas del lugarteniente de Kirchner en La Plata, Daniel Scioli. Y aprovechándome de las enseñanzas del poeta laureado Silvio Soldán, aquí van mis preguntas a Scioli:

Daniel, ¿De qué te sirvió la obediencia servil, si ahora no te alcanza la plata para pagar los sueldos?

¿De qué te sirvió ser candidato testimonial, si tuviste que perder en distritos del conurbano donde eras popular y te hicieron subir al escenario a reconocer la derrota como propia? ¿Y de qué te sirvió si encima tu jefe político ahora te culpa a vos por la derrota electoral?

¿De qué te sirvió defender a los Kirchner a capa y espada, a riesgo de caer en las incoherencias más estúpidas, para que después ellos te ignoren y ni siquiera te den los fondos que te corresponden?

¿De qué te sirvió asociar tu nombre a un proyecto -destinado a caer en cuanto la plata para repartir se acabe-, sabiendo que tu imagen era mejor y mas promisoria que la de ellos antes de todo esto?

¿De qué te sirvió hablar tanto "con esperanza, optimismo, siempre para adelante" cuando pudiste reconocer la situación real de la provincia y actuar en consecuencia?

¿De qué te sirvió hacer tuyas las batallas del kirchnerismo contra todo el mundo, confundiendo el interés de la provincia con el interés del matrimonio decadente?

¿De qué te sirvió quedar marcado como uno de los principales defensores del modelo, cuando esa posición de adulador no te provee fondos para la provincia en lo más mínimo? (A pesar de que lo opuesto tampoco funcione, sino pregunten a Schiaretti)

¿De qué te sirvió arruinar tus posibilidades de ascenso político cuando lo que recibis a cambio es el ninguneo constante?

¿De que te sirvió compartir boleta y aportarle votos a los Kirchner, en dos ocasiones, para que ellos te mostraran la más extrema ingratitud?

En la política argentina, uno entendería la dependencia hacia estos personajes, aunque sea de todos modos injustificable, si ésta trajera algún beneficio a cambio para el individuo dependiente. Pero esta relación nunca tuvo nada de eso. Scioli parece no aplicar el concepto de "lealtad" típico de los peronistas, que se define como aquello que empieza al mismo tiempo que el poder hegemónico y termina cuando comienza la impopularidad, algo que sí respetó cuando traicionó al hombre que lo había llevado a la política en favor del caudillo patagónico.
Lo positivo del proceso es que, con suerte, el gobernador se hundirá junto con la pareja presidencial. Y espero que entonces sepamos elegir a alguien que merezca ese título.

viernes, 21 de agosto de 2009

Un poco de insatisfacción

Compartir Panorama difícil si lo hay. Oposición que no se opone a nada, verborragia ante la primera emergencia. Confrontar con la intolerancia es monologar eternamente, y en la Argentina el monólogo factura. Desaparecieron los que se decían la otra cara de la moneda hasta el día anterior al 28 de junio, hicieron el precalentamiento y hoy pierden por abandono. Hasta el hartazgo con las críticas, hasta la estupidez con la pedantería. Recursos magníficos que superan los records en oratoria, que a la hora del debate se diluyen en frases coléricas e inconsistentes, expulsadas desde organismos repulsivos, merecedores de ser escogidos para un estudio de la idiotez humana. Ejemplos de creatividad demagógica, miles. Nada parece escapar al pulpo de la izquierda patética que sigue siendo la protagonista del efecto bola de nieve, que al compás de la destrucción, es vanguardia totalitaria que se inmortaliza: los argentinos quieren populismo, y la cultura populista no se erradica en 10 años. Al martillo de la experiencia le falta dar unos cuantos golpes, al menos así los demuestran los hechos. Entre el fútbol secuestrado y su necesidad intrínseca de liberación, y un senador que apesta, diciendo que hay que quitarle dramatismo a los deseos de absolutismo, sin lugar a dudas me trasladan a un mundo del revés. En muchos años las deudas pendientes despliegan sus formas, pero si hay algo que innegablemente quedó en stand by es la tarea de gobernar. Somos hombres de ninguna parte, así nos sentimos muchos de los que bregábamos por la restauración de un sistema que a pesar de su fortaleza empírica encontraron el modo de hundir. Practicando el aislacionismo y robusteciendo el imberbe que siempre tuvieron dentro, supieron sostener una farsa gigantesca y servirse del primer al último insensible que tuvieran en frente. Los referentes de la política Argentina no son serios, no hay alguna propuesta trascendente; el pánico salvaje a la palabra “privatización” ha dejado mudo a más de uno antes de verse relacionado con lo políticamente incorrecto. Así como dije que el que monologa factura, también pienso que aquellos que confrontan con el monólogo solamente en tiempo de elecciones también facturan. Siguiendo el hilo de lo que suma y lo que resta, hoy en la Argentina suma ser progre; un poquito más a la derecha, un poquito más a la izquierda, el progresismo tiene base para rato. Carecemos lastimosamente de una oposición que merezca llamarse de esa manera, que discursivamente es casi fantástica pero se paraliza ante los hechos. Buenas ideas pero falta de coordinación partidaria. La necesidad de nuevas estrategias que conduzcan a nuevas direcciones, para garantizar nada más y nada menos un freno a la decadencia.

Cromagnon: el juicio

No podía dejar de expresar mi opinión acerca del último fallo de la justicia con respecto al Incendio en Cromagnon. Muchos fueron los acusados, diferentes los intereses que se ponían en juego según la condición particular de cada una de las víctimas. No sólo entraba en el conflicto el dolor de los familiares, sino también, el deseo de adolescentes que impulsados por el fanatismo insistían en la falta de respeto, defendiendo a una banda de música sin ninguna otra evidencia más que la fe ciega que siempre crea intolerancia. No me creo capacitada para juzgar jueces, pero considero que las penas no fueron repartidas según el grado de responsabilidad en la tragedia. Condenar al empresario Omar Chabán a 20 años de prisión, pero sin embargo absolver a cada uno de los miembros del grupo Callejeros me pareció inconcebible. Sostener la inocencia de una banda de rock que promovía el uso de bengalas en sus recitales, y considerando aún que esa promoción inconciente les causó la muerte a 194 personas, es una defensa para temer. Es mi deseo y supongo que el de mucha gente, que este proceso pueda ser revertido en un futuro no muy lejano para conservar la salud mental de los familiares de víctimas en general y para que realmente pueda ser tomado como un modelo claro de condena ejemplar.

jueves, 13 de agosto de 2009

Cromwell no conoció a los argentinos

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El único lugar del mundo donde un cuerpo legislativo estaría dispuesto a recortarse facultades constitucionales, abdicándolas en el Ejecutivo, debe ser sin lugar a dudas la Argentina.

En cualquier país normal, uno esperaría que el Congreso -dejando de lado si está controlado por el mismo partido que el Ejecutivo- busque tener el mayor protagonismo posible, quitando relevancia al presidente de turno y adjudicándose un rol preponderante en la creación de políticas públicas.

Sería una comedia muy absurda, si no se tratara de instituciones reales, la comparación entre el Legislativo de un país normal y el Congreso argentino. La confirmación a la Corte Suprema de la jueza Sonia Sotomayor en Estados Unidos fue un proceso complejo donde fue cuestionada por republicanos y reconocida por demócratas, pero ninguno de los dos partidos minimizó el importante rol del senado en su confirmación.

Tratemos de comparar eso con cualquier discusión en el congreso argentino: todo es convertido en un asunto de "gobernabilidad" un concepto que sólo es un resabio de un sistema caudillista, del cual el electorado tiene mucha responsabilidad por su perpetuación: cuando votamos a alguien a la presidencia, nos gusta darle todo el poder para que nos lleve por el camino que quiera. "Balance de poder" debe ser un término inexistente en la ciencia política argentina. Aunque el sistema de listas sábanas también contribuye a ese esquema tramposo.

Los legisladores oficialistas jamás le prestan demasiada atención a los proyectos enviados -dudo que muchos de ellos los lean- sino que su labor legislativa y votaciones se basan exclusivamente en las siguientes máximas: "Si lo mandó la presidenta, yo voy a apoyar a la presidenta" y "¡Al carajo con esas mariconadas pequeñoburguesas de la división de poderes!"

La mayoría de ellos son simples lacayos de la Casa Rosada. Ni siquiera podemos decir que cambian de posición a pedido de sus amos, sino que cambian de posición frente a cualquier telefonazo que venga de Olivos. El senador (deshonra para el título) Miguel Pichetto, se ha visto varias veces en esa situación, exacerbada por la improvisación del kirchnerismo, que lo lleva a querer debatir y querer suspender el debate, todo en la misma sesión.

Como si no fuera suficiente con que se reúnan a votar y aprueben las medidas más retrógradas de la última década como estatizaciones masivas o impuestazos tecnológicos, ahora insisten en delegarle facultades a un Ejecutivo desgastado y que insiste en llevar a cabo venganzas personales contra aquellos que, según su pésima visión de la realidad, les hicieron perder las últimas elecciones. Ya ni siquiera hablamos de un mínimo de racionalidad política, para el gobierno todo tiene que ver con un revanchismo visceral que hace que incineren las cuentas públicas en pos de cumplir sus utopías ideológicas extinguidas en todo lugar donde reine la cordura.

Y mención especial merecen los diputados de los bloques de izquierda, como Solidaridad e Igualdad o Proyecto Sur. Aparentemente los mismos tipos que creen que el problema del kirchnerismo es que no va más allá con sus postulados, pensaron que está bien delegarle el poder a ese personaje que en su momento les parecía "demasiado neoliberal". Bravo, muchachos. Siempre demostrando que pueden ser los idiotas útiles de cualquier lacra que les sea afín ideológicamente.

El Congreso argentino, además de atravesar la adolescencia ideológica, vive en una clara niñez institucional. Le es imposible reconocer su rol, ponerse los pantalones y actuar por sí mismo. Los parlamentarios ingleses (y ya ni me refiero a los históricos, seguramente los actuales también) organizarían un suicidio en masa de conocer a los diputados argentinos.

miércoles, 5 de agosto de 2009

Corrupción menemista, y de la otra

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Los progresistas asociados al kirchnerismo, de distintas clases: ingenuos, comprados o ambas cosas, quedarán con un único premio consuelo cuando el modelo caiga. Para ellos será sencillo y lo dirán sin demasiados reparos: el modelo era perfecto "en la teoría" pero la corrupción desmedida hizo que fracasara, como si la corrupción en la gestión pública fuera incompatible con un modelo de concentración de la economía en manos del Estado, que tanto suelen defender, dejando de lado al caudillo que lo protagonice.

El caso que nos ocupa en este posteo es el de Diana Conti, una diputada que entraría dentro de la categoría "Residuos del Frepaso" que posee una extraordinaria cara de piedra que le permite defender a los Kirchner semanalmente en "A dos voces", quien se habría quedado con buena parte del sueldo de un asesor, además de pagarle en negro.

La misma gente que denunciaba la corrupción del menemismo -con la valiosa excepción de Elisa Carrió- permaneció callada mientras el matrimonio Kirchner cometía los actos de corrupción más aberrantes de esta década. Para ellos, los excesos cometidos en nombre del "socialismo del Siglo XXI" son totalmente aceptables. Inaceptable es que los tenga un gobierno moderado o de centro.

El caso mas notorio de estos últimos meses fue el de Graciela Ocaña, una de las primeras tránsfugas atraída por la "transversalidad" kirchnerista, que ahora denuncia, casi sorprendida, la injerencia de Hugo Moyano en la administración pública. Aparentemente le tomó seis años darse cuenta de cómo funcionaba el modelo corporativo y quiénes eran sus principales actores y beneficiarios.

Más allá de que la actitud de Conti vaya en contradicción con su encarnizada lucha contra "empresas explotadoras" y empleadores que pagan en negro, lo más extraño es la actitud del damnificado, el periodista Bruno Bimbi. En una entrevista dijo que jamás hubiera aceptado ser asesor de un senador menemista, y que aceptó trabajar con ella porque admiraba sus posiciones políticas y se encuentra decepcionado por sus comportamientos, que según él, son incompatibles con un pensamiento de izquierdas. Yo no se si se trata de ingenuidad o simple ignorancia, pero que alguien con una mínima formación crea que la antinomia esta dada entre "neoliberales corruptos" y "progres honestos" sólo demuestra una estrechez mental increíble.

Pero la realidad dice otra cosa. Cuando uno hace que el Estado administre desde fábricas militares hasta varias aerolíneas pasando por una empresa de agua, lo lógico es que se genere un margen mucho mayor para la corrupción gubernamental que en un Estado que se limita a hacer lo que le corresponde. La corrupción es inherente a este tipo de modelos, al contrario de lo que el progre idealista pueda creer.

Para este chico no existe algo asi como un progre corrupto. Cree que se trata de otra contradicción en términos, y de esas conocemos muchas, como "intelectual kirchnerista" o "economista de izquierda" Pero resulta que cae en la misma trampa conceptual que muchos defensores del peronismo, si el proyecto que defienden no funciona o se corrompe, deja de ser progresismo. Así, podrán continuar defendiendo las mismas políticas, diez o veinte años después de Kirchner.

Bruno Bimbi, el periodista que hasta hace muy poco tiempo escribía fervientes apologías del gobierno saqueador en su blog y otros lugares, ahora denuncia uno de los métodos característicos del modelo al que tanto defiende. Parece que el señor Bimbi recibió un poco de su propia medicina, a manos de la gente y las ideas a las que tanto admira. Mala suerte.

domingo, 2 de agosto de 2009

Una vuelta de tuerca

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Encontrar un nuevo rumbo en medio de una gran debacle educativa, el irrespeto a las autoridades y en simultáneo, el crecimiento de la delincuencia es el menos complicado, sobre todo si lo que se pretendió en esta última década, es reconstruir políticas de seguridad en una continua comparación con los 90, período del que por cierto nos hemos alejado hace casi 20 años. Siete años de estancamiento político y económico, en donde las medidas siempre se definieron en torno a lo que no eran: “no somos menemistas”, “no somos golpistas”, “no somos oligarcas”, “no somos la derecha”, no sabemos realmente como se autodefinen, aunque sin problemas podríamos definirlos. Hoy, avistando una nueva década, sufriendo la institucionalización de un modelo que pretendió mucho y logró poco, quiso redistribuir y se sostuvo combativo… Pretendió enfrentarse a Godzilla cuando ni siquiera podía pararse solo. En dos períodos presidenciales no logró sus propósitos, y sin lugar a dudas, está dejando muchísima más incertidumbre que la tan nombrada crisis de 2001. Se propuso acabar con la pobreza y con lo único que logró terminar es con la credibilidad del INdEC. La estafa de un modelo cuyo objetivo más importante es ser máquina del tiempo; y que tiene entre sus filas al rejunte terrorista de la década de los 70.
Volviendo a lo que me motivó a escribir: el vació que se viene produciendo en las familias argentinas y que encuentra en los jóvenes su máxima expresión, y para lo que aún, como en muchas otras materias, no se vislumbra una posible solución. Los valores de los que han sido depositarios los habitantes de nuestro país hace un siglo atrás, se encuentran irreconocibles hoy día e irreconciliables con las clases más bajas. Los sectores de menor poder adquisitivo fueron aquellos que en la mayoría de los casos impulsaron el progreso de la república. Aquellas poblaciones forjaron nuevos habitantes profesionales y ante todo trabajadores incansables para lograr el progreso personal y familiar y rehuir de una condición de pobreza que no condicionaba sus sueños de ascenso. Viéndonos hoy en día en una situación de deterioro sistemático de los valores que hicieron grande a este país, se hace difícil adoptar posturas cómodas en donde mirar a un costado haga que se solucione gran parte de la cuestión. No considero que la asistencia social sea el método apropiado para afrontar con inteligencia esta situación, los centros de recuperación o institutos de menores se han convertido en academias certificadas de delincuencia juvenil y la disciplina junto con el esfuerzo personal son malas palabras. Políticas pésimas están condenando a un país a un futuro demasiado incierto, niños que aún no superan la etapa de la infancia están consumidos por la droga, convencidos de que la educación jamás solucionará algunos de sus problemas, sintiendo una lejanía dolorosa y un odio perpetuo al trabajo como la única fuente de sustento. Reivindico la tarea de las madres y padres que con mucho esfuerzo intentan salvar a sus hijos de aquellas situaciones, pero a pesar de servir como valiosos ejemplos, todavía son muy pocos los casos. Las familias cumplen un rol fundamental en el país, y es en su seno que deben formarse los futuros hombres de bien que gobernarán la república directa o indirectamente desde la participación democrática; sin embargo no se promueve la participación en la construcción, peor aún, se fomenta el “desligue” de toda la responsabilidad y se transfiere esa tarea de contención y formación primaria a la institución escolar, (donde al ritmo de la omnipresencia, aumenta el vapuleo) o al estado desde la asistencia permanente, que luego toma tal o cual plan social como una herramienta particular de manipulación a la hora de las elecciones. Bajar la edad de imputabilidad es una buena medida a llevar a cabo; una idea que era atribuida a la “derecha”, hoy es compartida por la mayoría de las facciones políticas. Otra paradoja. Pero sobre todo, aquí el centro de la escena lo ocupa la familia, el hecho de que padre o madre o ambos, deban salir a trabajar para poder sostener la familia que eligieron a conciencia constituir, no es en absoluto una excusa para deslindarse de la responsabilidad. La paternidad responsable y la planificación familiar son dos factores que hacen al mejoramiento de la calidad de vida. Los padres son los únicos garantes de que esto ocurra, y no vale la pena, o vale bastante poco, si la preocupación comienza una vez que este proceso de deterioro hizo estragos en la conducta de los adolescentes. El compromiso debe estar desde la concepción y de ahí en adelante, afrontar las circunstancias futuras desde la acción racional y no bajo impulsos irracionales que conducen al odio o al resentimiento eterno a aquellos que, con mayores o menores obstáculos eligieron un camino tan legítimo como el de trabajar arduamente. Actualmente vemos muy lejano un profundo cambio de valores, pero las experiencias a largo plazo conducirán a ello y será sin duda, la verdadera gran transformación.

domingo, 19 de julio de 2009

Transgresores y complacientes

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El publicista Omar Bello me sorprendió gratamente en la última edición de la Revista Noticias, describiendo de manera brillante algo que pienso desde hace mucho tiempo:
Una de las peores herencias del kirchnerismo es el crecimiento y expansión de esta generación de periodistas “cool” que, de la mano del progresismo político, van por la vida pescando mojarritas que venden a precio de tiburón.

Desde los que visitan las villas asombrándose de los “horrores” que dejó el capitalismo de los noventa (importa poco que estemos en el 2009) hasta aquellos
que recorren las cárceles desde una mirada comprensiva, o los que dicen “última
dictadura” cada cinco minutos tomando un trago en cámara y haciéndose los cancheros.
Siempre me pareció que todos los periodistas que constantemente apelan a una supuesta "transgresión" tienen en común ser mucho más complacientes con el poder que aquellos que no pretenden todo el tiempo ser rebeldes. Después de todo, es una rebeldía barata, diseñada para que cualquier consumidor de la misma pueda sentirse bien, creyendo que encontró la causa de los males del mundo, mientras en el fondo subsisten los mismos problemas y los mismos valores falaces que los sostienen. Porque de eso se tratan estos productos, de que un lector cualquiera pueda sentirse indignado junto con Beatriz Sarlo ante sus quejas por la desaparición de las calesitas o las similitudes entre un shopping de Arizona y otro de Palermo. La conducta posterior que se espera de este público, consecuencia lógica para los autores de estas locuras en general, es que aquél advierta la naturaleza perversa y demoníaca del capitalismo global.

El artículo de Bello señala el caso particular de Caiga Quien Caiga,
programa que durante todos estos años se encargó de denunciar con arrojo y valentía la formación de charcos en las veredas de González Catán mientras sus noteros jugaban a ser Dustin Hoffman en El Graduado cada vez que tenían la oportunidad de estar cerca de Cristina Kirchner. Verdadero periodismo transgresor, seguro.


Lamentablemente la lista no termina ahí. A Bello se le olvida agregar que los programas políticos de la televisión abierta son una especie en extinción -otro efecto del kirchnerismo- y desde entonces, se encargan de cumplir ese rol los llamados "programas de archivo" que, por supuesto, se rigen por la misma línea ideológica de los casos mencionados. El ejemplo más obsceno de ese populismo adaptado para televisión es TVR, el programa de Diego Gvirtz. El programa debe tener el récord de haber mostrado todos los lugares comunes del progresismo en una forma accesible para el público medio. Desde reproducir de manera fiel todas las mentiras de Olivos durante el conflicto con el campo, acusando a productores agropecuarios de golpistas y nazis, hasta convertir a Castro y Chávez en los salvadores del futuro de latinoamérica, Gvirtz nunca pierde el momento para bajar línea política en un programa que había comenzado como
humorístico, y que quizás continúa siéndolo, aunque de otra manera. El tipo quizás se imaginaba a si mismo como el Michael Moore argentino, y continúa haciendo el ridículo semana tras semana. Básicamente, el programa es una adaptación de Página/12 para televisión. (Y uno a veces se pregunta si los comentarios de los conductores no estan guionados por José Pablo Feinmann)

Ser un "transgresor" para esta clase de periodistas, es estar en contra de un supuesto "establishment" u orden establecido que les resulta cada vez más dificil encontrar en la realidad, sobre todo porque los equivalentes de ellos en el terreno político han acaparado todos los espacios de poder y, por pura casualidad, han aplicado justamente las ideas que ellos tienen. Son tan incoherentes como Edgardo Depetri diciendo que Macri es el candidato del poder.

Y mientras el juego de la rebeldía barata continúe expresando su valor en altos ratings, seguirá pasando el tiempo hasta que tengamos un periodismo que deje de ser complaciente con ideologías fracasadas y pateando caídos, y se anime a cuestionar a los poderosos cuando éstos tengan la suma del poder público. Si lo hacen cuando termina el cíclo, ¿de qué sirvió?

sábado, 11 de julio de 2009

¿Dónde estaba la OEA antes del Golpe en Honduras?

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El 28 de junio por la madrugada fue sorprendido por las fuerzas militares el presidente de Honduras Manuel Zelaya, simultáneamente las jóvenes democracias latinoamericanas involucionaban siglos; como un revival, el desfile de militares se convirtió en una de las peores imágenes de los últimos tiempos. Desde una posición decididamente contraria a aquella que defiende las tiranías ejercidas por varios líderes centro y sudamericanos, resulta al menos complicado analizar el conflicto sin tener en cuenta algunos de los peligrosos factores que incidieron en éste desenlace golpista. Es preciso aclarar y declarar el repudio a estos mecanismos además de ilegales, nefastos de acceso al poder, pero también es preciso aclarar y declarar el repudio a las maniobras y manipulaciones que el presidente electo comandaba, atentando de modo gravísimo contra la vida democrática del país.
Cuando el Secretario General Insulza llamó a una reunión de los representantes de la Organización de los Estados Americanos el 30 de junio, el primer interrogante que surge es justamente el relacionado con esta cuestión: ¿dónde estaba la OEA antes del Golpe en Honduras? Las organizaciones que levantan las banderas en defensa de la democracia y los derechos humanos no estaban presentes en el debate acerca de una eventual reforma constitucional anterior al 28 de junio; tampoco intervino algún organismo cuando se planteó ese deseo presente actualmente en todo líder latinoamericano, que autodeclarado nacional y populista pretende transformar una república en una democracia a medias y plebiscitaria, y que en países como Venezuela ha virado hace tiempo ya, hacia un modelo pleno de dictadura reafirmada por el plebiscito o Argentina, que ha sabido ganarse un lugar a través de esos espacios en blanco que deja la ley, con una sucesión conyugal en el poder. Aquí se plantea una problemática clara, por un lado, una necesidad metafísica que impulsa a los líderes socialistas a hacerse en el poder cueste lo que cueste, cuáles profetas que llegaron a América Latina para guiar hacia la tierra prometida; por otro lado y contribuyendo a que estas situaciones se propaguen, sectores radicalizados que motivados y nostálgicos por el fracaso casi generalizado de las luchas setentistas y en contrapartida, el triunfo de la dictadura, ahora diarquía absoluta de los Castro, bregan por el rompimiento de las cadenas que un “imperio” supo solidificar. Lo cierto es que por estos días bien pueden sentirse airosos, ya que el aislamiento no logró desestabilizarlos, puesto que hoy Cuba, cuna americana del Socialismo y de la buena vida, goza de una enseñanza opuesta de raíz a un aparato ideológico del estado, y cuenta con centros de salud y parámetros de calidad de vida que arrojan los datos más envidiados en todo el mundo. ¿Quién podría discutir esta situación?, no lo sé, pero bien sé quiénes podrían reverenciarla: Rafael Correa (Ecuador); Hugo Chávez (Venezuela); Cristina Fernández y Néstor Kirchner (Argentina); Evo Morales (Bolivia); Daniel Ortega (Nicaragua). Es evidente que gran parte de América Latina está sujeta a los designios de estos personajes que niegan sus realidades para situarse más allá del bien y del mal. Lo único esperable es que quién deba intervenir diplomáticamente lo haga a tiempo, pues no es agradable legitimar todas las acciones de un Jefe de Estado que hoy minimiza causas y se alza en el rol de víctima, por el único mérito de haber sido a lo Allende, electo democráticamente; la democracia es una forma de vivir y proyectar a futuro, no es aquél medio para lograr ese fin. Luego, la llegada al poder por la vía del sufragio, es la excusa perfecta de todos los defensores a ultranza del socialismo, cuando en realidad, sus esfuerzos denotan una y otra vez un extraordinario interés en su progresiva eliminación.

viernes, 3 de julio de 2009

Resumen post-electoral

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La campaña electoral terminó de la misma manera que el conflicto por la Resolución 125: con un freno a las ambiciones oficialistas y un total autismo del gobierno en las horas posteriores. El gobierno demuestra siempre la incapacidad de reconocer errores en asuntos básicos de su administración: simplemente caen en la absurda conclusión de que "comunican mal" lo que hacen, como si gobernar fuera simplemente realizar propagandas que logren contradecir eficazmente a la cruda realidad que generaron. La sociedad parece haber despertado luego de seis años de avasallamiento de las instituciones. Como mínimo, si el Poder Ejecutivo quería mostrar alguna conducta propia de países civilizados, debería haber felicitado a los ganadores e invitarlos a la Rosada. La estupidez de decir "perdimos en la provincia pero a Macri le fue peor en la Capital" es absolutamente inadmisible viniendo de alguien que no debería situarse en el rol de analista política, siendo que se encuentra ocupando la Presidencia de la Nación. Pero es una conducta recurrente de los Kirchner: la de situarse por fuera de los acontecimientos a la hora de referirse a cualquier tema, como si se fueran ciudadanos de a pie.

En principio, hay que reconocer la extraordinaria campaña de Francisco de Narváez. Comenzó como un empresario desconocido para casi la totalidad de los bonaerenses, y termino ganandole a la figura mas reconocida del PJ, en su distrito más fuerte si dejamos de lado el norte argentino. Logró superar todo tipo de maniobras inescrupulosas del kirchnerismo, desde el adelantamiento de las elecciones hasta una campaña para relacionarlo con el tráfico de efedrina, y utilizó una serie de publicidades muy efectivas para captar el voto de sectores hartos del gobierno. Más alla de no haberlo votado y de que no comparta buena parte de su ideología estatista, su triunfo fue muy meritorio si tenemos en cuenta estas circunstancias.

Lo mas decepcionante y contradictorio fue el ascenso de un personaje retrógrado llamado Pino Solanas, de ideas mas radicalizadas y chavistas que el gobierno, que consiguió el segundo lugar (y cuatro diputados) en la Capital. Digo contradictorio porque se trata -supuestamente- del electorado más hostil al kirchnerismo, y sin embargo logra un segundo lugar alguien aún más a la izquierda de éste. Sus votantes son, como bien los define Macri, "románticos irresponsables" que no pusieron un mínimo reparo ante las arcaicas ideas de este cineasta. El solo hecho de que Cristina Kirchner lo haya llenado de halagos al día siguiente produce serias dudas sobre el futuro del gobierno, ¿buscarán asociarse a Solanas, llevando su gobierno algunos pasos más hacia el chavismo? Sinceramente espero que no.

Los resultados a nivel país parecen indicar un resurgimiento de la UCR, algo impensable hace pocos años. Cosecharon victorias en Mendoza, Entre Ríos, Santa Cruz y Córdoba en su lista de diputados. Habrá que ver como se traduce esto en una acción opositora conjunta en la Cámara de Diputados, donde, por lógica, deberían unirse al bloque del Acuerdo Cívico para lograr una cantidad de legisladores que les permita acceder a la mayor cantidad de comisiones. Sin embargo, los partidos "socialdemócratas" en los últimos años se han caracterizado por fragmentarse en múltiples bloques, convirtiéndose muchas veces en idiotas útiles del gobierno, o a veces en explícitos oficialistas. Está por verse si pueden solidificar su alianza dentro del Congreso, lo cual sería ideal.

Para el peronismo, comienza la etapa conocida como "sacarse de encima al derrotado" tan característica de sus ciclos de gobierno. Para los peronistas historicos, nadie es menos peronista que un peronista que pierde una elección, entonces hay que reemplazarlo por uno "verdadero" o sea, uno que gane elecciones. Es el único comportamiento que conocen en el día posterior a una eleccion nacional. Los anteriores incondicionales se convierten en críticos, porque conocen la dinámica del poder, y se consideran a si mismos como la próxima cara del mismo modelo corporativo. Saben que es muy probable que el próximo presidente salga de sus filas, más teniendo en cuenta la política de hacer internas en elecciones generales que tiene el PJ, entonces aprovechan la oportunidad de ser ellos los forjadores de un "Nuevo Peronismo" que para todos los fines prácticos, será el mismo de siempre.
De repente, nadie más es, fue o ha sido kirchnerista, excepto aquellos que con tan poca visión decidieron atar su suerte a la del ex presidente, como el caso de Daniel Scioli, quien ya ha demostrado que su éxito en la política se basa en un monton de frases cursis robadas al personaje de Peter Sellers en la película "Desde el Jardín" y a no expresar en concreto ninguna preferencia política.

Espero que la oposición pueda llegar a un consenso sobre unos pocos temas clave que permita llevar cierta institucionalidad y reglas de juego claras al gobierno, y no se pierda entre la falta de ideas y el populismo barato demostrado cientos de veces en la campaña electoral, en la cual no hubo ningun candidato que no estuviera a favor de las estatizaciones masivas. Tienen la oportunidad de articular un verdadero republicanismo, no la desperdicien.

viernes, 22 de mayo de 2009

"La culpa no es del chancho..."

Compartir El 2008 fue el mejor año de crecimiento económico dijo nuestra Presidente, aunque este crecimiento fue opacado por “el impacto mediático de algunos conflictos”. Cuando me propuse actualizar el blog, quise pensar en las cosas buenas porque en tiempo de campañas los aspectos dudosos de los candidatos salen solos a la luz. Mi problema aparece cuando comienzo a leer algunos diarios o cuando oigo en TV este tipo de declaraciones que me desesperan. Si nos referimos al proceso de la 125 como un conflicto más entre otros, que la prensa se encargó de exagerar, vamos perdidos hacia la nada misma. Si estoy diciendo tonterías me gustaría que me respondieran la causa que llevo a la Presidenta a trasladar la resolución al parlamento; si la causa es “el impacto mediático” creo que debo callarme o bien debo pensar que la Jefa de Estado es imbécil.
En las próximas elecciones se va a poner en juego un “modelo” de país según algunas tendencias; la duda que me surge al pensar, es si realmente se pone en juego un modelo de país o es un mismo modelo que cambia de manos; las encuestas más generosas declaran un empate técnico y las menos proclaman a Francisco de Narváez como el triunfador en la contienda electoral, primero en el peronismo disidente. No hay una propuesta clara por parte del PRO, es tragicómico ver que hasta hace un año Felipe Solá era uno de los tantos caballos de batalla del kirchnerismo y hoy lo vemos del lado diametralmente opuesto. El importante papel que se estaba jugando la centro-derecha en las elecciones de 2007 con la victoria de Mauricio y Gabriela en las urnas, hoy no tiene mayor mérito que el de haber reunido un buen número de votantes. Esa victoria que había generado un gran debate entre los “intelectuales” de izquierda hoy deviene en una de las tantas tendencias de “lo políticamente correcto”. Nada nuevo.
Por último, quiero aplaudir a Marcelo Tinelli ya que el micro-reality que supo crear en su programa es una forma fantástica de humor político; aquellos que tengan el tupé de machacar contra él, deberían agradecer la mano que Marcelo les esta brindando, sacando de la oscuridad a personajes que no merecerían un segundo de cámara. Un programa jamás puede ser visto como el responsable de marcar la tendencia hacia uno u otro candidato; eso solamente es parte de la ignorancia política de los televidentes, la ignorancia política no es resultado de un programa, es resultado del desinterés y la comodidad en la que se han subsumido gran parte de los habitantes de la Argentina. De aquellos que prefieren incorporarse casi por instinto a la berretización institucional de la anarquía, con el lema “que se vayan todos” o a la suficiencia con la que se habla cuando afirman que todos los políticos son igualmente corruptos.
Muy pocos jóvenes se interesan por las cuestiones políticas y eso es muy preocupante, pocos de ellos saben de qué se tratan las próximas elecciones y menos aún quiénes serán los candidatos. No hay tomas de posición, nadie quiere involucrarse en los asuntos del país, pero sin embargo el libro de quejas se incrementa cada segundo. No podemos culpar a la autoridad de tiranía política, de poca sensibilidad, o de incapacidad de la gestión, si nosotros mismos no estamos a la altura de las exigencias que una República nos impone sobre la marcha. La inmadurez política es un tema menester para tener en cuenta camino hacia la formación de la democracia. No hay que olvidar que en este sentido, “la culpa no es del chancho, sino de quien le da de comer”.

domingo, 26 de abril de 2009

Prensa libre de ideas

Compartir Si algo han llevado al ridículo los promotores de la prensa políticamente correcta en este país, es la caracterización de la tan llamada "derecha". Los políticos de derecha en este país tienen las mismas probabilidades de ser retratados objetivamente por la prensa que los empresarios en el cine de propaganda soviético. Cuando veo estos informes manipulados para mostrar supuestas contradicciones o frases que ellos consideran casi delictivas dentro de su código pseudoprogre, me pregunto cuánto falta para que aparezca la música característica de Darth Vader en Star Wars, y la pantalla se llene de tinieblas.

Y como es claro que la palabra liberal o neoliberalismo ya no les sirve en su discurso de ataque, porque se les acabaron los políticos con esa denominación, buscan calificar a gente que hace tres meses fue kirchnerista dentro de una "alianza de la derecha". Realmente desconozco si el dinero llega con fluidez desde Olivos hacia los dos principales canales de aire, pero sería demasiada casualidad que justo el mismo día y en el mismo horario, los dos canales refloten un fragmento de un programa de Mariano Grondona de hace algunas semanas donde el periodista bromea junto con Hugo Biolcati sobre la posibilidad -ya instalada entre cualquiera que hable de política argentina con seriedad- de que Cristina no termine su mandato. Los dos programas no dudaron en calificar el diálogo como "peligroso", e incluso Chiche Gelblung comentó que las palabras de Biolcati le recordaban los comandos civiles, transmitiendo fielmente el discurso oficial.

No entenderé nunca la paranoia del progresismo por las alteraciones de la democracia y los supuestos "golpistas" especialmente cuando ellos forman parte de la corporación política que volteó a De la Rúa, el presidente que recibió el mayor número de votos desde 1983 a la fecha, y lo hicieron sin pestañear. Al parecer para ellos todos los golpes son producto de un agente indefinido llamado "la derecha". No importa que el peronismo haya apoyado o participado de varios golpes en los últimos sesenta años. Su naturaleza popular lo exime de toda culpa.

Viendo la línea argumental de los ataques contra Grondona, parece que la nueva víctima de los informes sponsoreados por el gobierno serán los golpistas y reconocidos agentes de la CIA, los editores de The Economist. Ellos dijeron lo mismo que Grondona y Biolcati, inclusive en un tono bastante serio. Pero dudo que la hayan leído alguna vez.

ACTUALIZACIÓN 29/4: Ahora la propia Cristina lo dijo, horrorizada por los comentarios de Grondona y Biolcati. Quizás estemos ante un caso de doble personalidad, pero ¿se trata de la misma presidente argentina que tuvo intenciones de renunciar el día después del rechazo de la 125 en el Senado? Y como bien recuerda Claude, ¿se trata del mismo gobierno que manda a Emilio Pérsico a decir que si pierden las elecciones se van? Dejen de ver golpistas en el ojo ajeno, por favor...

sábado, 11 de abril de 2009

"Il Duce"

Compartir No quería sentarme a escribir un nuevo artículo porque realmente no sabía por donde empezar desde hace bastante tiempo. No distingo donde comienza y termina nada, y sin embargo había creído que vivíamos en un sistema que intentaba asemejarse a una República, para no ser tan ambiciosa, algo que quería parecerse a una democracia básica si se quiere, democracia a medias a la que fuimos acostumbrándonos porque era lo que había y “es lo que hay”. El peronismo se regenera en la estupidez, el kirchnerismo es una circunstancia del peronismo histórico que pretendió siempre llegar a los diferentes sectores a través de la aplicación de un estado fascista, corporativista, sin respeto a las instituciones, y utilizando el totalitarismo de un líder como vehículo de ideas vacías, en fin, eso conocido como "La Tercera Vía". Hoy, mal que me pese, no logro diferenciarlo del peronismo de Perón y no puedo ver en este gobierno más que la consecución de los objetivos del General en sus máximas expresiones. No falta un rival, el chivo expiatorio culpable de cualquier atraso que nos acompaña por años, han sido los judíos, es y fue la oligarquía golpista.
Golpean a puño cerrado cualquier resto de República, no han dejado resquicio democrático y lo hacen a la vista de todos porque nada les importa más que reforzar el estado fascista que supieron construir cuales ingenieros de lo social que todo han planificado; la intención de Cristina o de Néstor no es edificar un nuevo país bajo los preceptos de la democracia, el único fin que los mantiene en el poder es lograr el liderazgo a través de la demagogia y el totalitarismo, como ya vimos en experiencias fascistas pasadas, es un déjà vu que no tiene nada que envidiarle a Mussolini. Están cegados de poder y saben que la única manera de mantenerse en él, es mediante el silencio y la pasividad de los que ven pero no se involucran, a través de los sectores que no tienen nada que perder pero pueden ganar un plan social o un electrodoméstico, la costumbre ha terminado de demoler la razón, quiero dejarle estas cuestiones a la psicología porque excedieron cualquier comprensión a nivel político, si de democracias convencionales hablamos. En palabras de Tocqueville, es importante estar alerta a las intromisiones del estado en las pequeñas libertades porque eso prepara el terreno para los grandes avasallamientos. Los ingenieros sociales siempre comienzan sus excursiones en aspectos que pasan inadvertidos, envueltos en una retórica aparentemente inofensiva que habitualmente rebasa en buenas intenciones, pero cuando el rostro de la arrogancia aparece nítido suele ser demasiado tarde para la reacción.